Bitcoin, una de esas ideas revolucionarias que puede cambiar el mundo. No entraré a hablar de lo que es, mucho se ha escrito sobre eso. Me enfoco en mi experiencia de usuario final.
Mi primer contacto fué cerca del 2010. Vivía en Venezuela, en años en que el gobierno controlaba el cambio de moneda. Mi trabajo se había convertido en un problema, todos los dias había que inventar alguna triquiñuela para evadir los controles gubernamentales absurdos y comprar dólares en el mercado negro, entonces me entero de esta maravilla. Una moneda que no es emitida por nadie, pero que nadie puede cesurar o vetar y sin limites internacionales. Un sueño hecho realidad.
Siempre me ha gustado la matemática y los ordenadores. Todo era increiblemente elegante. La prueba de trabajo impulsada por la avaricia de los mineros, la encriptación asimétrica usada a la inversa, la cadena de bloques, una inofensiva base de datos, al combinarla con la prueba de trabajo se convierte en una caja fuerte, la red peer to peer que permite que toda la información sea pública y al mismo tiempo privada. Todos esos son conceptos relativamente sencillos que un aficionado como yo pudo entender, pero que jamás hubiera tenido la genialidad de poner juntos. ¿Quien es Satoshi Nakamoto? La mente genial descubrió que esas tecnologías juntas pueden crear el nuevo dinero, se dió cuenta desde el principio que algo tan revolucionario le traería muchos enemigos, y fue además tan sabio como para permanecer anónimo y escondido tras el pseudónimo.
Confieso que dejé pasar el bus. Hoy debería ser uno de los que se hizo millonario con el BTC. Eran tiempos salvajes, no habían intercambios, comprar bitcoins era mandar dinero por internet a un desconocido sin seguridad de recibir algo a cambio. Hice alguna minería en mi CPU. Si, en esos tiempos aún era posible! Un PC casero de los primeros dual core, alcanzó a generar unos centavos, despues hice minería con dos BlockErupter, que a los pocos meses ya eran obsoletos, y vi como el precio pasó de 30 a 200 dolares, mandé mis documentos a MtGox para activar la cuenta unos dias antes del crash.
Yo tenía claro que es un concepto genial, que los numeros y el algoritmo que lo sustentan son elegantes y seguros, pero nunca pensé que se convirtiera en oro digital, yo lo veía como un medio de hacer transferencias de dinero internacionales, no como reserva de valor o inversión, ese fué mi error. Mi billetera nunca tuvo mas que unos pocos centavos, si hubiera gastado 500 dolares en frijoles mágicos, hoy tendría los huevos de oro.
Despues de divagar, vamos al grano.
Lo Bueno:
1 - Siempre será escaso. El limite de emision de monedas, asegura que nunca habrá suficientes para todas las personas del mundo. Si la emisión se repartiera uniformemente, a cada persona del mundo le tocarían unos pocos centavos, esto da una sensación de escasez que impulsa permanentemente la subida del precio. Además no hay banco central imprimiendo billetes, ni gobiernos emitiendo bonos de deuda. Es la moneda anti-inflacionario por excelencia. Además no está sujeto a la politica económica de ningún pais.
2 - Ningun gobierno lo puede detener: Ya viví en Venezuela un control de cambio. Que el dinero que tienes en el banco o en la mano cada día vale menos, y que no hay forma de cambiarlo a otra moneda. Es una sensación de estar encerrado, impotente y preso. Y despues de burlar ese muro, hay otro muro exterior impuesto por un gobierno extranjero que impone sanciones, y dificulta mas las operaciones. Los bancos están sometidos a las leyes del pais en que operan y a los caprichos de sus gobernantes. La red peer to peer es algo por ahora ningún gobierno puede detener.
3 - Bajos costos de operacion: Para transferencias internacionales de como las que hace rutinariamente un importador, el costo por operación es muy inferior al de la operación bancaria.
4- Anuncios de empresas que aceptan BTC y de paises como Salvador con sus nuevas leyes, parecen sugirir que el BTC tendrá un gran futuro.
Lo malo:
1- Costo energético: La ecología nos interesa a todos. Usar el BTC, de alguna manera es apoyar un increible desperdicio de energía. Por ejemplo algunos comparan el gasto de energía de los mineros y dicen que es mucho menor que el de la banca mundial. Pero es una comparación absurda. La banca mundial procesa millones de operaciones por segundo en el mundo. La red BTC solo un bloque a la vez, que contiene un numero muy limitado de operaciones.
2- Costos de operación: Aunque las transferencia internacionales son mas baratas con BTC, las pequeñas compras de todos los días si son mas costosas. Los micropagos, necesitan tener microcostos. Y el costo de operar directamente en BTC es alto. Y si vamos a usar una billetera o pasarela de pagos de un tercero, se pierde la magia. Para son mejor las altcoins como dogecoin que tienen costos de operacion mas bajos.
3- No es accesible para todos. La mayoría de la gente no lo entiende, la gente con menos conocimientos técnicos pueden ser victimas de estafas.
4- ¡La prueba de trabajo puede dejara de ser segura!: En el horizonte lejano se ve venir la mayor amenaza para el BTC. La prueba de trabajo, la cerradura que mantiene los bitcoins seguros, puede ceder cuando se haga realidad la computacion cuantica. Entonces el BTC morirá de obsolescencia o quedará dependiendo de 2 o 3 corporaciones que puedan permitirse mineros cuanticos. ¿Cuando pasará eso? Es dificil saberlo, ¿5 años o 30 años?. Las compañias como Google o IBM hacen anuncios ocasionales sobre sus avances en este campo, pero lo que pasa en China es un completo misterio. Si el BTC pretende reemplazar el oro como reserva de valor a largo plazo no debería tener fecha de caducidad.
5- Las persecución de los gobiernos puede empeorar. China a vuelto a poner controles al BTC, no se sabe que pueda pasar en el futuro. Otros paises pueden poner prohibiciones, sacando las empresas serias del mundo BTC y dejandolo en manos de la gente menos confiable.
Mis conclusiones:
El BTC llegó para quedarse. Todos deberían tener algo de BTC y otras criptos. Pero hay que estar atento al mercado y esperar una caida para comprar a buen precio. Parece que a largo plazo los precios siempre suben, pero eso puede cambiar. Como siempre, no invertir mas que lo que se está dispuesto a perder.